Extirpación del ovario

Antes del procedimiento, la paciente se reunirá con su médico para consultarle sobre el método de tratamiento más eficaz. Si es posible extirpar solo un ovario en lugar de dos, el médico siempre lo recomendará. Sin embargo, en ciertos casos es necesario extirpar ambos. Según el método que utilice el médico, la cirugía de extirpación de ovarios puede variar. Generalmente, se realiza bajo anestesia general; el cirujano realiza pequeñas incisiones en el abdomen e inserta un tubo delgado con una cámara e instrumentos especializados para guiar la extirpación de los ovarios. Es importante consultar con el médico antes del procedimiento para saber exactamente qué esperar.

Inmediatamente después de la cirugía, los pacientes pueden sentir dolor y malestar en el lugar de la incisión y en toda la zona pélvica. Por lo general, se recetan analgésicos para controlar estos síntomas. Según el tipo de procedimiento realizado (cirugía laparoscópica o abierta), los pacientes pueden recibir el alta en pocas horas o requerir una breve estadía en el hospital. Las personas deben tener un apoyo planificado durante los primeros días posteriores a la cirugía, ya que se deben evitar actividades como levantar objetos pesados y realizar ejercicios extenuantes para promover una curación adecuada.